El virus Zika
El virus Zika es un virus muy cercano filogenéticamente a virus como Dengue, Fiebre Amarilla, Encefalitis Japonesa y del Nilo Occidental. Se transmite a través de la picadura del mosquito del género Aedes, tanto en un ámbito urbano (A. Aegypti) como selvático, en zonas tropicales de África, Asia y América.
A mediados de mayo de 2015 se presentaron los primeros casos en zonas tropicales de Brasil y comenzó el alerta en varios países de América Latina. En la zona de playas del sur de Brasil no se reportaron casos de virus Zika, pero hay que estar en alerta contra el Dengue y Chikungunya.
Característica de la enfermedad
Período de incubación: 3-12 días
Clínica: la infección puede cursar de forma asintomática o con una clínica moderada que dura de 4 a 7 días y se autolimita.
- Fiebre alta
- Dolor de cabeza intenso.
- Conjuntivitis no purulenta.
- Dolores musculares.
- Dolor en las articulaciones principalmente de manos y pies.
- Debilidad o astenia.
- Erupción cutánea que puede comenzar en el rostro y luego se extiende por todo el cuerpo.
- Edema o hinchazón en piernas y pies.
- Menos frecuente: dolor retro-orbitario (detrás de los ojos), falta de apetito, vómitos, diarrea o dolor abdominal.
Tratamiento: No hay tratamiento específico. El tratamiento sintomático y de soporte incluye reposo y el uso de acetaminofén o paracetamol para el alivio de la fiebre. También se pueden administrar antihistamínicos para controlar la picazón asociada habitualmente a la erupción de la piel.
No se aconseja el uso de aspirina debido al riesgo de sangrado y el riesgo de desarrollar síndrome de Reye (una enfermedad que afecta el hígado) en niños menores de 12 años de edad.
Se debe ingerir abundantes cantidades de líquidos para reponer la eliminación por sudoración, vómitos y otras pérdidas insensibles.
Aislamiento del paciente:
- Durante la primera semana de la enfermedad (fase virémica) evitar el contacto con mosquitos, para no transmitir el virus a otras personas.
- Utilizar mosquiteros impregnados o no con insecticidas.
Prevención en la población general:
- Reducir los criaderos de mosquitos en casas y peridomicilios.: evitando tener agua estancada sin circulación.
Recomendaciones:
1- Embarazadas: se recomienda consultar con su obstetra antes de viajar y extremar las precauciones personales para evitar el contacto con los mosquitos, teniendo en cuenta el posible riesgo de malformaciones congénitas si contraen la infección durante el primer o segundo trimestre de la gestación.
2- Durante la estadía:
- Evitar visitar lugares infestados por mosquitos.
- Prevenir la picadura de mosquitos mediante el uso de repelentes sobre la piel expuesta y sobre la ropa, con aplicaciones cada 3 horas
- Utilizar ropas claras y que cubran la superficie corporal.
- Evitar estar al aire libre en el amanecer o anochecer.
- Utilizar telas mosquiteras.
- Si durante el viaje presenta fiebre, acudir a un centro de salud local, sobre todo en el caso de las embarazadas, y continuar tomando las medidas adecuadas para protegerse de las picaduras de mosquitos. No automedicarse.
3- Al regreso:
- Consultar al médico inmediatamente en caso de presentar síntomas de dengue, chikungunya o virus Zika
Fuente: información ofrecida para la comunidad por la Sociedad Argentina de Pediatría.